Tras varias semanas siendo restaurada, la maquinaria del reloj de la Torre ha vuelto a ser instalada este viernes en su lugar y la ciudadanía va recuperado poco a poco el sonar de las campanas que marcan el paso del tiempo.
La intervención ha devuelto a la maquinaria un aspecto impecable y los operarios de la empresa que ha llevado a cabo los trabajos han estado toda la mañana conectando todas las piezas, aunque de momento está en fase de pruebas, ya que esta tarde seguirán ajustando su funcionamiento.
Aprovechando que el reloj se encontraba fuera del edificio, la Concejalía de Patrimonio, que dirige el edil César Pérez, ha aprovechado para que fueran repintadas las paredes y reparar el sistema eléctrico que proporciona iluminación a las cuatro esferas que indican la hora a quienes ven la torre desde los cuatro puntos cardinales.
