La Guardia Civil ha desmantelado un grupo criminal dedicado al hurto de cableado de cobre, una investigación que, aunque se inició con un robo en Pinoso, reveló una extensa red que afectó a múltiples municipios en las provincias de Alicante y Albacete.
La investigación fue puesta en marcha por el Equipo ROCA de Ibi el 24 de septiembre, a raíz de un significativo robo de cerca de 700 metros de cable de cobre en Pinoso. Este suceso fue el hilo del que tiraron los agentes, identificando rápidamente a los dos primeros sospechosos con antecedentes por delitos similares.
El grupo operó desde agosto, cometiendo hurtos en varias poblaciones y sustrayendo un total de cerca de 3.000 kilos de cobre. El perjuicio económico a diversos ayuntamientos supera los 50.000 euros.
El grupo actuaba de madrugada, utilizando siempre el mismo modus operandi: sustraían el cableado, lo trasladaban a un punto apartado para retirar el recubrimiento plástico y, posteriormente, vendían el metal purificado en un centro de reciclaje.
- Sorprendido In Fraganti: Durante la madrugada del 31 de octubre, en Onil, uno de los implicados fue sorprendido por agentes de la Policía Local y la Guardia Civil cargando cobre en un vehículo, aunque logró huir a pie.
- Detenciones Finales: La fase de explotación tuvo lugar el 7 de noviembre, cuando agentes del Equipo ROCA de Ibi arrestaron a dos de los integrantes cuando intentaban vender 120 kilos de cobre sustraídos horas antes en Salinas. Días después, se detuvo a un tercer autor.
La investigación también ha implicado al responsable del centro de reciclaje donde se realizaban las transacciones, quien ha sido investigado por un presunto delito continuado de receptación. Se estima que este varón de 26 años obtuvo un beneficio ilícito de unos 15.000 euros en tres meses mediante la compra de varias toneladas de material robado.
La resolución de los hechos se ha logrado gracias a la eficaz coordinación entre los equipos ROCA de Ibi, Almansa y Hellín, y la colaboración crucial de las Policías Locales de Onil y Elda.
Los detenidos, dos hombres de 36 y 41 años y una mujer de 38, así como el investigado, han sido imputados por 11 delitos que incluyen hurto, receptación, falsedad documental y un delito contra la seguridad vial. Todos han sido puestos a disposición de los juzgados de San Vicente y Novelda, que han decretado la libertad con cargos.

Nota de prensa Oficina de Relaciones Informativas y Sociales de la Guardia Civil
