Con la presentación de los dos trabajos del escritor, Juan Ramón Torregrosa, esta tarde se ha inaugurado el curso 2024-205 del Club de Lectura Maxi Banegas, que alcanza la XVII edición.
El acto ha congregado a personas integrantes del club así como amistades del escritor que mantiene vínculos con Pinoso.
El edil de Biblioteca, César Pérez, ha sido la persona encargada de iniciar el acto, agradeciendo al autor su presencia, así como a las personas que integran el club de lectura, por su compromiso en mantener vivo este club que el próximo año, cumplirá su mayoría de edad.
La bibliotecaria Anabel Pérez, ha desgranado las 10 lecturas previstas en este curso que incluye géneros variados, de autores españoles y extranjeros, premiados e incluso llevados a la gran pantalla.
El curso dividido en trimestres se clausurará el 4 de junio, celebrando efemérides destacadas como el día de las escritoras el 14 de octubre.
Seguidamente ha tomado la palabra Javier Monzó, quien ha calificado a Torregrosa como un erudito “formando parte del círculo de personas que poseen la habilidad y preparación de abordar varios campos de la literatura”. Monzó, a quien considera a este escritor como “un buen amigo”, ha recordado que la primera obra de teatro que escribió, Sanchica y Aldonza, fue representada por Yorick Teatre en el año 2017.
Javier ha dado a conocer el amplio currículum del autor, así como los diferentes trabajos que ha escrito en las diferentes modalidades como poesía y novela.
Por su parte, Torregrosa ha iniciado su intervención agradeciendo al ayuntamiento de Pinoso, la invitación para inaugurar el Club de Lectura, dando a conocer como fueron sus inicios en el mundo de la escritura en su época de adolescencia, cuando gano un premio de poesía en el año 1973.
Tras dar a conocer la sinopsis y el origen de sus trabajos “Quedar en las palabras (poesía) y Céfiro y Nube (Novela), se ha iniciado un turno de palabra donde las personas asistentes han podido interactuar con el autor acerca de las obras presentadas en esta tarde.
Para Torregrosa, “la poesía nos forma y nos deforma porque es muy exigente.
