Alrededor de 250 personas han participado en la última carrera del año. Divertida y solidaria, la San Silvestre aúna el deporte con la alegría de la Navidad en cada una de las ediciones. Este año la recaudación de la carrera ha ido destinada a la Asociación local de Enfermos y familiares de Alzheimer Respir.
Galletas de jengibre, ovejas, camareros navideños, papás y mamás Noel, renos, elfos o hadas son los atuendos típicos con los que los participantes acuden a esta prueba atlética en la que además de los premios a los primeros en cruzar la línea de meta se suman los de mejor disfraz.
Este año el ganador de la carrera ha sido Odei Zenitagoia Sousa, seguido por su entrenador y presidente del Club de Atletismo de Pinoso, Antonio Albert Pérez y en tercera posición Rubén Brotons Muñoz. La primera mujer en entrar a meta ha sido Patricia Rico. Juan Luis Pérez que ha ejercido como spiker ha animado la carrera.
El edil de Deportes, José Ángel Pérez aseguraba estar muy contento por la alta participación y la buena acogida que tiene la carrera cada año, y reconocía que en cada edición la imaginación de los participantes es increíble. Antonio Albert, presidente del Club de Atletismo también se sentía muy contento por la alta participación.
Los premios a mejor disfraz han sido elegidos por un jurado y otorgados por los ediles de Deportes, José Ángel Pérez y de Cultura Silvia Verdú:
Primer premio: las ovejas
Segundo premio: los camareros
Tercer premio: Iguals i sense traves
Cuarto premio: Papá Noel y sus renos
Quinto premio: galletas de jengibre
Además, también se ha hecho una rifa con decenas de regalos que han donado diferentes establecimientos locales.
Antes de la San Silvestre también se han celebrado carreras de corta distancia para niños y niñas que han recibido al pasar la línea de meta un cucurucho de chuches.
La Edad de Oro también ha colaborado en la carrera ofreciendo chocolate con toña a los participantes al finalizar la prueba.