El municipio de Pinoso despidió hoy sábado sus fiestas patronales con el tradicional Socarrat, la última jornada de sueltas de vaquillas en el recinto habilitado del paraje de Santa Catalina. El evento, que congregó a cientos de vecinos y visitantes, cerró dos semanas de intensas celebraciones marcadas por la participación popular y el arraigo a las tradiciones locales.
Desde las 18:15 horas, como en días anteriores, el recinto acogió la entrada de las carretones infantiles entre aplausos, emoción y un ambiente familiar. A continuación, la suelta de vaquillas que en esta ocasión correspondió a la Ganadería La paloma
Al acto acudieron las Reinas de las Fiestas —mayor e infantil— acompañadas de sus cortes de honor, los Festeros de 2025, así como miembros de la corporación municipal, entre ellos la alcaidesa accidental, Silvia Verdú y la concejala de Fiestas, Elisa Santiago, El que fuera alcalde de Pinoso, hasta ayer viernes, Lázaro Azorin, ha querido agradecer públicamente el trabajo desarrollado por voluntarios y la peña El Garrot, para que la suelta de vaquillas siga desarrollando en la localidad,
El Socarrat es, desde hace años, uno de los momentos más esperados por la ciudadanía. Simboliza el final de las sueltas de vaquillas, pero también el cierre simbólico de las Feria y Fiestas de Pinoso, que en esta edición han contado con una amplia programación cultural, musical, infantil y religiosa.
Durante la suelta, numerosos jóvenes participaron activamente en el ruedo, protagonizando carreras, quiebros y algunas caídas, siempre bajo la mirada atenta del público, que respondió con risas, aplausos y vítores a cada lance.
Con la celebración del Socarrat, el Ayuntamiento da por concluidas unas fiestas marcadas por la elevada asistencia, el buen tiempo y la convivencia. Desde la Concjalía de Fiestas se ha valorado muy positivamente el desarrollo del programa, destacando la colaboración vecinal y el comportamiento ejemplar de los asistentes.
Las fiestas de Pinoso se despiden hasta el 2026 , dejando tras de sí una estampa de tradición, alegría y participación que ya forma parte de la identidad del municipio.